Alcalá de Guadaíra representada por una ninfa en los actos del recibimiento en Sevilla del rey Felipe II.
El 1 de mayo de 1570, un año antes de la célebre Batalla de Lepanto, visitaba Sevilla el rey de la primera potencia europea del momento, Felipe II, monarca de España y de un gran imperio de ámbito mundial. Uno de los reyes más poderosos de todos los tiempos.
Felipe II estaba celebrando cortes en Córdoba con motivo de una sublevación morisca en las Alpujarras cuando, aprovechando la cercanía, Sevilla le solicitó una visita a la ciudad, que fue en principio declinada por el monarca para mejor resolución de las revueltas cordobesas. Pero poco después anunció su visita. Sevilla tenía menos de dos semanas para darle un recibimiento de altura.
El recibimiento en Sevilla se organizó en torno al puerto y a la armada que en aquel momento estaba a punto de zarpar hacia América. El marcado carácter naval de la recepción se preparó desde la Casa de la Contratación, implicando en ello a todos los maestres, capitanes y jefes de navíos, con lo cual el monarca pudo contemplar la flota que permitía el comercio con las Indias y que tanta riqueza aportaba al reino.
Juan de Mal Lara
El intelectual sevillano Juan de Mal Lara ( y el Maestro Mayor Benvenuto Tortello ) fue comisionado por la ciudad de Sevilla para dirigir el programa artístico y cultural del recibimiento que se dispensaría a tan ilustre visitante, quedando autorizado también para la posterior edición de un libro sobre el evento que fue titulado “Recibimiento que hizo la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla a la C. R. M. del Rey don Felipe N. S.”.
Juan de Mal Lara nació en Sevilla en 1524. De su padre se sabe que era artista pintor y de su madre, probablemente de humilde linaje, que no sabía firmar. Estudió gramática latina y griega con el humanista Pedro Fernández. Después se marchó a Salamanca como paje de los sobrinos del Cardenal donde estuvo seis años estudiando. De allí a Barcelona y finalmente de vuelta a Sevilla donde abrió su “Estudio de gramática y latinidad”.
En febrero de 1561 aparecieron en Sevilla unas hojas sueltas con versos difamatorios contra la iglesia y el clero. La Inquisición encarceló a Juan de Mal Lara durante dos meses como sospechoso, hasta que salió libre de culpa. Una vez rehabilitado su buen nombre fue encargado de realizar misiones culturales al servicio de la corte y de la ciudad.

El día de la visita del rey Felipe II a Sevilla
Muchos pueblos de la provincia de Sevilla presentaron a la vista del monarca, mediante expresiones artísticas, las particularidades destacadas y los elementos propios de sus lugares.
Alcalá de Guadaíra estuvo representada por la figura tallada en madera de una Ninfa, resaltando la importancia del agua que Sevilla recibía de esta localidad, su pan (trigo) y el cultivo del olivo. Ceres (trigo) y Minerva (Palas Atenea) (olivo) a las que se alude en los versos que la acompañan.
Describía de esta forma Juan de Mal Lara la figura de la Ninfa de Alcalá junto a unos versos que la adornaban:
Ofrécese, en las postreras figuras hacia la ciudad, Alcalá de Guadaíra, en forma de hermosa y dispuesta ninfa, con una ropa azul y la sobrerropa morada, y un manto colorado, caído hacia el brazo izquierdo. Encrespados los cabellos, y una fortaleza casi al retrato de la que tiene, con su guirnalda de olivas, y un plato en la mano izquierda con algunos panes, que son las hogazas de Alcalá. A los pies, una pila de mármol para recoger agua, que manaba del pecho derecho, y con los dedos de la mano derecha estaba ordeñando en forma de una mujer que da leche a quien cría. En los pechos tenía un joyel de una piedra preciosa y dos ángeles dorados, que la tenían.
Juan de Mal Lara, 1570
Yo humilde hija piadosa
a mi madre doy el pecho
bañando no a mi despecho
de Sevilla la hermosa
el verde y florido lecho.
De Ceres, y de Minerva,
soy, Señor, favorecida;
Minerva me da la vida
y Ceres la espiga y yerba,
con que ella es entretenida.

*Información extraída del «Estudio, Edición y Notas» publicado por el doctor Manuel Bernal Rodríguez de la Universidad de Sevilla.